Toracoplastia

Sí, como en todas las operaciones que buscan retirar exceso de piel, esta cirugía deja cicatrices en la mitad del tórax. En el caso de las mujeres, pueden esconderse bajo el sostén. En hombres peludos, los mismos pelos ayudarán a camuflarlas.

No es una operación dolorosa, se dejan medicamentos adecuada para controlar el dolor postoperatorio

Lo más habitual es que la toracoplastía se haga solo una vez en la vida. El envejecimiento y los cambios de peso significativos pueden hacer que el problema de la laxitud vuelva, pero normalmente no justifica repetir la intervención.

Esta interrogante se aplica a la toracoplastía anterior, es decir a la que abarca la parte del pecho. 

Existen varias alternativas de acuerdo a la ubicación y tamaño de los pezones en relación al excedente de piel que se retirará, así como a la estatura del paciente. Las opciones incluyen el colgajo pediculado, el injerto libre de pezón con VAC, las órtesis de pezón y finalmente el Tatuaje Médico de Areola-Pezón.

No, todas las edades son aptas si la laxitud de piel lo justifica. Es más importante entender que la estabilidad del resultado pasa por la capacidad de mantener el peso corporal dentro de un rango de ojalá no más de 3-5 kilos de variabilidad.

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